Cada 16 de octubre se celebra mundialmente el Día de la Alimentación. La fecha fue proclamada en 1979, coincidiendo con la creación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). El objetivo es concientizar a los pueblos del mundo sobre el problema alimentario mundial y fortalecer la solidaridad en la lucha contra el hambre, la desnutrición y la pobreza. Este año 2021, cobra especial relevancia por la crisis alimentaria que ha dejado la pandemia del Covid-19.

Las cifras estiman que alrededor de 3000 millones de personas (casi el 40% de la población mundial) no pueden permitirse una dieta saludable. Esto no solo se debe al acceso a los alimentos, sino a la importancia de tener sistemas agroalimentarios sostenibles en el tiempo, que generen suministros suficientes, nutritivos, inocuos y asequibles para todos. También a la necesidad de que la población tome conciencia en relación al desperdicio de alimentos, el cuidado del medio ambiente, el control de los sistemas de producción, para obtener alimentos seguros, variados y nutritivos que estén al alcance de todos.

Para esto, docentes e investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias trabajan arduamente, para generar conciencia, enseñar y buscar vías de solución a los problemas alimenticios actuales.

Actualmente, en esta unidad académica, se desarrollan numerosos y variados proyectos que ayudan a visualizar el compromiso asumido, algunos de ellos son los siguientes:

• “Aprovechamiento integral de materias primas regionales para la formulación de alimentos saludables dirigidos a grupos de la población con requerimientos alimentarios específicos” (Dirección: María Sance. Codirección Emilia Raimondo) 
• “Control de calidad de cerveza e insumos. Reutilización de residuos” (Dirección Adriana B. Giménez. Codirección Sandra Rodriguez) 
• “Alimentos frutihortícolas regionales diferenciados por su valor agregado“(Dirección Lucía Vignoni. Codirección Adriana Gimenez).
• “Caracterización y calidad sensorial de alimentos vegetales” (Dirección Nancy B. Ventrera. Codirección: Viviana Guinle)
• “Elaboración de margarinas con oleogeles de aceites de oliva” (Dirección Claudia Amadío. Codirección Verónica Araniti).
• “Inocuidad alimentaria: valoración de metales pesados, residuos de plaguicidas y sustancias nutricionales en aceite de oliva, tomate, papa, uva, semillas comestibles y carne comercializados en Mendoza, vinculación con BPA Y BPM” (Dirección: Alejandro Gascón.Codirección Emilia Raimondo)
• "Evaluación de la calidad diferencial del aceite de oliva virgen obtenido en la provincia de Mendoza, Argentina, con miras a registrar una indicación geográfica:"(Dirección Verónica Araniti. Codirección  Mónica Mirábile).

Además, desde el inicio de la pandemia en marzo del 2020, la Facultad se sumó a una campaña solidaria de alimentos promoviendo en su comunidad la iniciativa 'Agrarias Solidaria'. La licenciada María Sance, docente de la FCA y referente de esta campaña, nos comentaba al respecto:

No poder garantizar la seguridad alimentaria, es un problema grave, que toda la población tenga acceso a alimentos inocuos, saludables y seguros, es parte de la soberanía alimentaria de los individuos. Como una gran parte de la población no accede, se generan tantas campañas de asistencia, como la que participa la Facultad con la acción de "Agrarias Solidaria", en la que se entregan bolsones de alimentos a 50 familias de la Esc. José Sixto Álvarez de Chachingo. Estas iniciativas son de suma importancia para que los individuos puedan acceder a los alimentos que necesitan para su normal desarrollo y obtengan los nutrientes necesarios.

La importancia de los sistemas agroalimentarios en nuestro día a día

Un sistema agroalimentario óptimo es aquel donde no se desperdician alimentos y la cadena de suministro alimentario es más resiliente ante crisis bruscas como fenómenos meteorológicos extremos, los aumentos de precios o las pandemias, todo mientras se limita, en lugar de empeorar, la degradación medioambiental o el cambio climático.

De hecho, los sistemas agroalimentarios sostenibles proporcionan seguridad alimentaria y nutrición para todos, sin comprometer las bases económicas, sociales y medioambientales para las generaciones futuras. Conducen a una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor para todos. 

La pandemia del COVID-19 ha dejado en evidencia la necesidad de tomar decisiones importantes en materia alimenticia. Ha hecho que sea aún más difícil para los agricultores, (que ya se confrontan con la variabilidad del clima y los fenómenos extremos) vender sus cosechas, mientras que el aumento de la pobreza empuja a un mayor número de residentes de la ciudad a utilizar los bancos de alimentos, y millones de personas necesitan ayuda de urgencia. 

En este sentido, el rol de la institución educativa toma central relevancia. Todas las carreras de Ciencias Agrarias están enfocadas en promover la igualdad y el aprendizaje, para impulsar la innovación y estimular los ingresos rurales. También en generar contenido académico sobre producciones sostenibles de alimentos nutritivos asequibles y que promuevan la participación de los agricultores.

Pero el cambio necesario depende de toda la sociedad, de la toma de conciencia de cada individuo en sus acciones diarias, ante todo reduciendo la pérdida y el desperdicio de alimentos, de la difusión de esta problemática, de un cambio en el estilo de vida, más saludable y sostenible.

Los esfuerzos para mitigar el cambio climático, la degradación medioambiental y nuestro bienestar dependen de ello. Necesitamos activar un movimiento alimentario que abogue por un cambio ambicioso. Es el momento de mirar hacia el futuro que tenemos que construir juntos.

Sumate al #DíaMundialdelaAlimentación: compartí tu acción individual en nuestras redes sociales de la Facultad.