El Diplomado en Auditoría Bromatológica cuenta con una duración de 18 meses e inició allá por junio de 2019, con un cursado semanal, los días viernes a la mañana en la facultad de Ciencias Agrarias. Su presencialidad fue posible hasta el 13 de marzo del 2020, con el comienzo de la pandemia de Covid-19 y las medidas de aislamiento social, preventivo y obligatorio. Luego, como en toda la educación, se emprendió el desafío de la virtualización para que sus participantes pudiesen continuarlo, y desde ese entonces, ha tenido gran éxito, contando con la participación de alrededor de 100 de sus estudiantes, todos referentes de la bromatología provincial.
Basado en un conjunto de contenidos y actividades prácticas, este diplomado capacita a auditores e inspectores bromatológicos, personal de empresas de alimentos, responsables y técnicos del control higiénico sanitario de alimentos, con el fin de que participen en equipos interdisciplinarios para la correcta implementación de Inocuidad Alimentaria. Además, busca proporcionar a sus estudiantes elementos de juicio para determinar si los alimentos cumplen con las especificaciones de calidad; favorecer la adquisición de conocimientos de las condiciones que deben cumplir los establecimientos y equipamientos para la producción segura de alimentos; y desarrollar habilidades para auditar la selección y utilización apropiada de materias primas e insumos que se requieren para las diferentes elaboraciones.
Aproximadamente el 50% de los estudiantes de este diplomado son inspectores de Bromatología, de todos los municipios de la provincia, también profesionales de Defensa al Consumidor, de Fiscalización y Control del Departamento de Higiene de los Alimentos, además de bromatólogos y otros trabajadores asesores de empresas en el área de alimentos.
En cuanto al comité organizador de este diplomado está confomado por la Dra. Emilia Raimondo y la Lic. Gladys Dip, ambas docentes pertenecientes a la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCUYO, y el Lic. Daniel Rabino, Jefe del Departamento de Higiene de los Alimentos del Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes del Gobierno de Mendoza.
Según Gladys Dip, licenciada en Nutrición, integrante de la cátedra de Industrias Agrarias de la FCA, docente en la Licenciatura en Bromatología y coordinadora del Diplomado, 'algo muy positivo que se ha dado en este difícil contexto de pandemia es que, más allá de todo, no sólo hemos podido seguir dictando el diplomado, sino que además tenemos mayor participación de nuestros estudiantes porque muchos de ellos venían desde lejos a cursar y se les complicaba bastante asistir. Hoy les resulta más fácil poder cursarlo y mantenerse activos en el cursado por lo que están muy entusiasmados con la virtualidad'.
Por su parte, Emilia Raimondo, Ingeniera Química y profesora adjunta de la Cátedra de Industrias Agrarias, doctora en Ciencias de los Alimentos, como coordinadora del diplomado comenta que 'en realidad ha sido muy importante porque no sólo es una capacitación para que los inspectores se transformen en auditores, sino porque ha cambiado el modo de hacer la inspección, ha permitido que los jefes de bromatología de los municipios se vuelvan a reunir y se pongan de acuerdo en cómo realizar las inspecciones, en cómo realizar determinadas auditorías y qué tener en cuenta en determinados tipos de industrias, etc. Esto significa que en el diplomado lo más importante es la puesta en común, el ida y vuelta entre profesionales, la nueva puesta en funcionamiento del Consejo Bromatológico, estamos muy contentos'.
Al respecto, Raimondo agrega un ejemplo: 'el primer curso virtual de esta nueva etapa ha sido sobre Dietéticas, un tema que viene discutiéndose desde hace tiempo, qué se debe controlar en una dietética y qué no, y los mismos participantes realizaron un trabajo en donde expusieron sus experiencias, y ésto es muy importante como puntapié inicial para poder realizar una reglamentación sobre la temática a nivel provincial, es decir, a raíz del diplomado será posible realizar muchos cambios y avances en la bromatología de Mendoza'.
Por su último, Daniel Rabino, licenciado en Bromatología y jefe del Departamento de Higiene de los Alimentos, perteneciente al Ministerio de Salud del Gobierno de Mendoza, también coordinador del Diplomado, destaca que la importancia del mismo 'es la transformación de muchos inspectores provinciales en auditores bromatológicos, lo que permitirá a estos trabajadores realizar su tarea con un mayor conocimiento de los aspectos relevantes a analizar de cada industria y/o empresa del sector de los alimentos. Estos nuevos auditores, al visitar un establecimiento, podrán evaluar el estado de situación general del mismo pero atendiendo a cuestiones específicas y fundamentales de cada actividad en particular, gracias a las herramientas que les brinda este diplomado, dictado por especialistas en cada rubro. Esto repercute directamente en una mayor calidad de la actividad a nivel provincial'.