Con la visita de referentes nacionales e internacionales de la entomología y el aula magna llena de participantes comenzó el Congreso Nacional de Entomología, que se desarrolla desde el lunes 21 hasta el jueves 24 de mayo en la Facultad de Ciencias Agrarias.
Se trata de un encuentro que se realiza cada tres años y que sirve para que se reúnan personas que investigan sobre insectos, puedan intercambiar experiencias y plantear desafíos para futuras investigaciones.
El primer congreso de entomólogos se celebró en Mendoza en 1995 y cada tres años se realiza en diferentes ciudades. En esta ocasión nuestra provincia vuelve a ser sede y la FCA es la anfitriona de especialistas del país y del mundo.
En esta oportunidad, el programa resultó atractivo para más de un investigador ya que estuvieron abarcadas todas las especialidades de la Entomología.
Los ejes centrales que abordó la 10° edición son la biodiversidad, la sustentabilidad y la globalización. También se enfocó en cómo los aportes del desarrollo científico pueden resolver problemas sociales, acompañando el desarrollo del país.
El Congreso Nacional de Entomología contó con profesionales dedicados a la docencia.
La entomología, una mirada profunda
Sergio Albero Roig-Juñent es presidente del 10° Congreso Nacional de Entomología. En diálogo con el Área de Comunicación de la FCA explicó la importancia del encuentro y cuáles son los desafíos de los entomólogos.
-¿Por qué decidieron abordar la biodiversidad, la sustentabilidad y la globalización en esta edición?
-En la organización del congreso participó mucha gente y la discusión se centró en ejes temáticos que englobaron aspectos que necesitan ser revisados. En el caso de la biodiversidad, es fundamental teniendo en cuenta que sin biodiversidad no podriamos vivir, pero el manejo de la biodiversidad implica cuestiones ecosistémicas. En el caso de la globalización está relacionada con que hay muchas plagas, pestes, uniformización de paisajes y el hecho de que se cultive soja, por ejemplo, va en detrimento de la pérdida de la biodiversidad, de las capacidades ambientales. Si bien la globalización es algo bueno también tiene sus aspectos negativos, que hay que tratar de frenar. Y la sustentabilidad tiene que ver con que todo el desarrollo en la entomología -ya sea cuestiones de aplicación agrícola, cuestiones de biodiversidad, manejo integrado de plagas o cuestiones de entomología sanitaria y veterinaria - tienen que estar acompañadas de la sustentabilidad del medio ambiente. Si vamos uniformando el medio ambiente, vamos destruyendo más cosas, vamos perdiendo biodiversidad, y así menos capacidad vamos a tener como país para poder desarrollarnos.
-¿Qué avances permiten alcanzar los congresos?
-Los congresos son generadores de nuevas investigaciones, tienen una cuestión social en donde gente joven se junta con gente más grande o gente que está desarrollando las mismas cosas, y sirve para que se encuentren personas. Eso crea una sinergia en la cual hay nuevos proyectos. Y lo otro que pasa es que a pesar de la mediatización de transmitir información virtual, siguen siendo necesarias las reuniones en donde las personas se vean cara a cara, en donde se conozcan personalmente. El trato personal es muy importante y a veces una charla modfica el desarrollo tecnológico.
-¿Cuál es el desafío actual de los entomólogos?
-Yo soy especialista en biodiversidad y en ese aspecto tenemos un desconocimiento muy grande sobre la biodiversidad en Argentina. Creo que todavía nos falta conocer más del 60% de la biodiversidad del país. Calculamos que hay unas 120 mil especies de artrópodos y muchas de ellas que todavía están sin identificar. Otro desafío es ver como estos cambios ambientales van a impactar en las distribuciones de las especialidades, de que nuevas plagas van a llegar, hay nuevas especies de mosquitos, por ejemplo.