El Día Mundial del Agua que se celebra el 22 de marzo y el Día Nacional del Agua el 31 de marzo, es una excelente ocasión para replantearnos el compromiso en favor del agua y ponernos en acción con medidas que mejoren los hábitos referidos a la utilización y consumo de los recursos hídricos.

En el mes del agua, la Facultad de Ciencias Agrarias puede enorgullecerse de finalmente, después de un arduo trabajo por parte de las distintas áreas de la gestión, lograr concretar un gran objetivo relacionado a este recurso tan importante, que genera un gran alivio en nuestro campus.

Históricamente, la FCA contaba con dos sistemas que proveían agua para sus cultivos:

• El sistema de distribución de agua superficial, el cual depende del caudal del río Mendoza suministrado por el Departamento General de Irrigación (DGI) a través de turnados de riego.
• El agua subterránea, extraída desde el pozo construido en la segunda mitad del siglo XX, previo a 1970.

En el año 2015, este último dejó de funcionar debido a su deterioro. Las paredes internas del antepozo se desmoronaron obstruyendo la tubería que desciende a más 190m bajo tierra, provocando que se rompa la bomba impulsora, dejándola inutilizable y en condiciones calamitosas.

Esto generó grandes inconvenientes para con el suministro de agua del Campus, así como complicaciones para los distintos sectores de la Facultad. Por este motivo, a partir del 2018, la gestión actual comenzó con el ambicioso y comprometido trabajo destinado a la reparación del pozo que, tanto por la gran inversión económica que conlleva una obra de tal magnitud, como por la pandemia mundial que comenzó en el año 2020, el proyecto se vio retrasado.

Actualmente, la facultad puede celebrar la reparación del pozo, en dónde inicialmente se ejecutó el encamisado de la tubería principal, para luego instalar una electrobomba sumergible y realizar el reacondicionamiento del tablero eléctrico de la perforación. La obra contó con una importante gestión económica que posibilitó reparar exitosamente el pozo, lo que mejora notablemente el manejo del agua de la Facultad, repercutiendo directamente en el sistema de riego y demás actividades de la institución.

Entre los beneficios obtenidos con la puesta en marcha del pozo de agua subterránea de la FCA, se pueden destacar:

• El sector productivo recuperará cultivos afectados por la falta de agua.
• El abastecimiento de agua para las pasturas mejora notablemente permitiendo aumentar la producción bobina.
• Las parcelas de investigación se ven beneficiadas por el incremento de agua para las mismas y para los distintos ensayos.
• Se posibilita la suplementación de riego en zonas de interés patrimonial como el Jardín Botánico, espacios verdes de la FCA y el área de deportes (cancha de fútbol, quincho, etc.).
• Los estudiantes verán una importante mejora en sus prácticas en el manejo de cultivos gracias a la mejor condición de las parcelas.
• Se verá maximizada la eficiencia de la mano de obra para las tareas de riego.